Obra de teatro que explora la fragmentación de la comunicación en la era digital, donde una página que no responde se convierte en metáfora de la desconexión entre individuos. A través de imágenes simbólicas y una puesta en escena minimalista, la obra nos lleva por escenas breves y potentes que revelan la ansiedad, la espera y la búsqueda de sentido en un mundo interconectado pero aislante.